La típica fotografía de Varanasi es la que podemos ver en los libros, televisión e Internet. La fotografía postal en donde se ve a los peregrinos descender a muy tempranas horas de la mañana hacia el Río Ganges para concretar el ritual de la purificación. Pues bien, no es necesario prestar mucha atención para ver a los “hombres santos” practicar yoga, pero también es posible ver a los encargados de cremar cadáveres. Sin duda una estrechísima relación entre la muerte y la vida celestial. Sin embargo todo este misticismo choca de manera abrupta con varias muestras populares que hasta pueden herir susceptibilidades al mostrar de manera cruda la pobreza del país. En ese sentido te toparás con personas que a pesar del alto grado de contaminación del río se bañan en él sin temor a contraer alguna irritación a la piel. Asimismo no te sorprendas si algún ambulante intenta venderte algo, ya sea comida, flores o ropa.
Es importante mencionar que la ribera del Ganges en Varanasi cuenta con 100 ghats que son las escalinatas que debemos descender para llegar a él. ¿Sabías que estas escalinatas datan del siglo XVIII? Lo curioso es que cada una de ellas tiene un nombre distintos y claro también una función particular.
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